Un nuevo episodio del caso "amebas asesinas", destapado por La Estrella hace un par de semanas, se escribió este martes, ya que el presidente de la Comisión Control de Gestión y Fiscalización del Consejo Regional de Valparaíso, Roberto Chahuán, y el core por Marga Marga, Emmanuel Olfos, llegaron hasta la planta de tratamiento de aguas servidas, ubicada en el paradero 17 de Olmué. Esta visita en terreno tenía como finalidad conocer el funcionamiento de las instalaciones y determinar el origen de las falencias denunciadas largamente por los vecinos.

En la instancia, detalla Olfos, los consejeros pudieron constatar que solo uno de los tres módulos que posee la planta está funcionando en su totalidad. Aquella sería la posible respuesta a los malos olores que se perciben en el sector y, por consiguiente, de los malestares y problemas de salud que denunciaron los miembros de la familia Silva Ruiz a nuestro diario hace dos semanas.

Tras la visita inspectiva, las autoridades del Gobierno Regional reflexionaron sobre la premura de encontrar una solución y, subsanado eso, determinar responsabilidades. De hecho, recalca Elfos, "la urgencia de nosotros ahora es dejar la planta funcionando por el tema de los vecinos, para que no se genere un evento sanitario. Más que nada la visita fue para saber qué falta para terminar la planta y así los vecinos tengan una como corresponde, independiente de quién sea el culpable del problema".

Para tranquilidad de los vecinos del sector, la visita no solo quedó en eso, ya que este vez se tomaron acciones concretas e inmediatas para buscar una solución al asunto. En ese sentido, quien preside la Comisión de Control de Gestión y Fiscalización informó que el municipio presentará, a más tardar el viernes 29 de marzo, una propuesta técnica y financiera al Gobierno Regional, "de modo que se puedan subsanar los errores y agilizar la regularización y mejoramiento de la planta de tratamiento", se indica en un escrito enviado a La Estrella por el consejero Roberto Chahuán.

Durante esta visita inspectiva, la alcaldesa Macarena Santelices llegó a terreno para reunirse con los consejeros. Si bien los core detectaron falencias en el funcionamiento de la planta, la primera autoridad comunal insistió en su llamado a la calma.

"El agua de la planta de tratamiento está siendo tratada de acuerdo a la normativa vigente, todos los meses se hacen las pruebas de agua. Una planta de tratamiento jamás va a entregar agua potable. Eso hay que decirlo, el agua no está apta para la bebida, pero sí debe complir con normas mínimas que entrega el ministerio de Salud, y esas normas se cumplen", aseguró a diferentes medios de comunicación que llegaron al lugar.

Inicialmente la planta de tratamiento de aguas servidas consideró una inversión de 1.600 millones de pesos. No obstante, todo ese dinero no alcanzó a ser inyectado a la obra.

Según detalló Olfos, los pagos se congelaron porque no se estaba ejecutando el proyecto según las necesidades. Ahora, en la Comisión de Fiscalización del Core se deberá determinar qué ocurrió y, luego de eso, decidir si se entregarán nuevos recursos o si estos serán asumidos por el municipio. J