En San Pedro, la preocupación crece incesantemente con la presencia de un vecino al que no quieren: la central Nehuenco II, y el eventual daño a su calidad de vida.

Los sanpedrinos están inquietos por convivir con el complejo termoeléctrico Nehuenco. Afirman que ha provocado importantes daños en su calidad de vida.

Paulo Matamala es uno de los vecinos de la localidad quillotana, y ha asumido la vocería de los vecinos. Cuenta que desde hace algunos años "han aumentado los cáncer estomacales y los problemas respiratorios. A las tres de la mañana hay un hongo tóxico gigante, y en el sereno cae lluvia tóxica".

El sanpedrino asegura que en el sector de Lo Varela, los agricultores han perdido cultivos. "Se les hacen unas manchas negras en repollos, lechugas y tomates, incluso los plásticos del invernadero duran mucho menos, hay que cambiarlos más seguido, y eso afecta mucho el bolsillo de los agricultores", comenta.

acelerar la turbina

El temor de los afectados se dispara con una posibilidad incierta: el proyecto de ampliación.

Colbún Energía, empresa a cargo de la central Nehuenco, puso en marcha una tentativa denominada oficialmente "Optimización de la unidad 2 complejo Nehuenco Quillota" que apunta a ampliar la producción energética aumentando la velocidad de la turbina. Este proyecto no implica otra obra de construcción, sino que la ejecución de un software que acelere la turbina para que trabaje más rápido. Las instalaciones de la central construidas previamente ya habían sido elaboradas con más capacidad de la que podían estaban autorizadas a operar.

El 18 de abril pasado, el Servicio de Evaluación ambiental hizo llegar al municipio la solicitud de evaluación para la Declaración Ambiental del proyecto. La municipalidad realizó los estudios de rigor, y sacó sus propias conclusiones.

Con apoyo del Concejo Municipal, se solicitó formalmente que la evaluación ambiental considerara participación ciudadana, lo que no estaba contemplado. Para que se aceptara la solicitud se debía cumplir con 10 personas inscritas. Se registró el triple, de modo que la solicitud tuvo que ser aprobada. La primera sesión se programó para el día de ayer en el centro Cultural de San Pedro, en la que participará la ciudadanía, la empresa y el municipio.

cuatro observaciones

La municipalidad de Quillota, a través de su Unidad de Medio Ambiente, presentó cuatro grandes observaciones, las que se refieren al consumo de petróleo y de agua; la emisión atmosférica por el mp2.5, y la incorporación de los modelos de planificación local.

El alcalde (s) Óscar Calderón indicó que "nosotros hemos provocado y solicitado que esta declaración incorpore la participación ciudadana, esto si sucedió, por lo tanto vamos a estar muy atentos en participar activamente como municipio a través de la unidad de Medio Ambiente, tanto en la asesoría que los vecinos la requieran, pero también presentando estos cuatro puntos".

Estas objeciones tienen como plazo el mes de agosto para ser resueltas. En este sentido el alcalde (s) manifestó que "la municipalidad ha sido muy clara al respecto pedimos y exigimos la mayor rigurosidad en torno a este proyecto" así mismo lo ratificó el encargado del departamento municipal de Medio Ambiente, Javier Cisternas, pues "desde el punto de vista de la visión municipal, si esta observación no es subsanada, por supuesto la municipalidad no va a dar aprobación al proyecto".

colbun

Consultamos a la empresa Colbun Energía sobre las especificaciones de este proyecto, y nos detallaron que con el software se pretende anular la limitación de la potencia bruta máxima de generación de una de las unidades, permitiendo un aumento de 42 MW (de 386,6 a 429 MW), pero sin elevar las emisiones autorizadas.

Del mismo modo, aseguran que la iniciativa no considera nuevas obras ni intervenciones físicas al interior del Complejo; tampoco contempla un incremento en las emisiones atmosféricas y de ruido, ni un consumo de agua por sobre lo ya autorizado; ni tampoco plantea un aumento de la potencia de generación de las Unidades 1 y 3 de Nehuenco.

A través de un comunicado, expresaron que "el proyecto también busca fijar el límite máximo de utilización de diésel en el Complejo, adecuando su uso a las actuales condiciones del sistema eléctrico, manteniendo siempre su condición de respaldo. El combustible principal seguirá siendo el gas natural. Además, dado el uso del gasoducto y oleoducto del Complejo, no habrá flujo de vehículos por concepto de transporte de combustible".

Asimismo, señalaron que "este proyecto de optimización para la Unidad 2 considera un monto de inversión de cerca de 50 millones de pesos y un periodo de pruebas de dos a cuatro semanas". J